jueves, 13 de marzo de 2008

Sonidos renovados



Iván Ferreiro
Mentiroso Mentiroso
3º Disco: 2008
Componentes: Iván (voz), Amaro Ferreiro (guitarra), Pablo Novoa (bajo), Toni Toledo (batería), Ángel L. Samos (teclado), Emilio Saiz (guitarra).

Con 16 temas nuevos, ninguno de ellos en vano, ninguno de relleno, ninguno de más, Iván consigue hacer recordar que los nuevos sonidos son compatibles con su estilo y sorprende una vez más a su fieles ‘repelentes’. No hace falta repetir lo que ya se sabe, pero por si hay alguien despistado, diremos que la carrera de Iván Ferreiro en solitario ya estaba consolidada antes de la llegada de este nuevo disco. Pero con él afianza la fidelidad de sus seguidores, además de captar la atención de otros muchos, no sólo por sus estrategias de marketing, sino también por la buena música que suena y resuena tras escuchar el disco. Y es que en ‘Mentiroso Mentiroso’ Iván crece como músico y abre la puerta a nuevos sonidos que combinan bastante bien con su voz, su banda y el estilo tan propio que viene defendiendo en los escenarios. Esto es un gran paso para un músico con una carrera tan amplia como la suya, no muchos consiguen avanzar, después de tanto tiempo, mezclando estilos y sonidos tan diferentes. Y él lo ha conseguido. Por eso este no es un disco fácil, hay que digerirlo con tranquilidad, con cada una de sus escuchas se descubren nuevas facetas del mago de Los Piratas y se intuyen nuevas influencias.
Son 16 canciones en las que Iván rinde homenaje a grandes artistas de nuestro país como el madrileño con el que a más de uno le gustaría ‘ajustar cuentas’. Para este último, Rocco Sigfredi debe ser algo más que una canción de un buen amigo, porque aunque en ella Iván lo “cuenta todo sin decir cómo pasó, es imposible no entenderlo”. Una canción pausada, lenta, contenida en la que Iván parece querer romper la línea que le separa de nuestros oídos, para adentrarse en ellos y encoger el alma, al ritmo de lo mejor de un maestro. Sin duda es mucho más que una simple canción de su tercer álbum. En este disco Iván marca también la diferencia recordando a un ‘freak’ con el que ha colaborado en numerosas ocasiones. Y así arma su voz ‘en escena’ en cortes como “La canción del no” o la que cierra el disco, “Magia”. En ambas, la interpretación teatral tiene un papel crucial y es imposible no imaginarse a Iván delante de un auditorio desgranando lo mejor de su faceta como actor, otro aliciente para asistir a todos sus conciertos. Su puesta en escena sería un acto sublime con la incorporación a su show de Bunbury, el maestro en estas lindes. Pero aún en solitario no hay una sola razón para no asistir a sus conciertos, sólo una nota de “Canción húmeda” puede rendir a un estadio entero mientras Iván se deja todo en el estribillo. Y si hacemos un recorrido por todas las pistas de este trabajo encontramos también ritmos de vals en “Magia” y “De mí un pandero”, algo que hasta ahora nunca había experimentado. El resultado de ambas es el mismo: dos obras maestras en las que el vello se eriza con cada sonido y la letra nos hace pensar una y otra vez. En la primera escucha se descubre también una canción cuya letra en principio parece fácil, pero que no lo es en absoluto: “Secretos deseos”, una canción paralela en la que el diálogo está presente y se recurre a un juego de palabras encriptadas que revelan detalles cada vez. “Jet Lag” parece provenir del sentimiento adolescente visceral y a la vez de la más madura estructura musical posible, algo que ya consiguió con Los Piratas y con lo que ahora cuenta en solitario.
La irrepetible voz de este gallego nos transporta a ese espacio ‘sideral’ de los 90 que él mismo inventó y con el que se hizo un hueco en la historia de la música de nuestro país. Un espacio en el que la melodía pop y la voz contenida de Iván no recuerdan a nada igual, la diferencia la marca él con su interpretación y su color de voz tan peculiar. Tras el lanzamiento del disco, el próximo 25 de marzo, tendrá que defenderlo en directo, donde una vez más se dejará la piel. 16 canciones cantadas desde el estómago, que saben a pop, melodías que te transportan a los setenta donde la guitarra y la batería lo eran todo, y voces que te marcan, que se quedan dentro de tu piel y de tu mente para escapar con cada verso. Sin duda es un disco en el que Iván ha estado trabajando de forma eficiente durante mucho tiempo y del que puede presumir dentro y fuera de nuestras fronteras, porque para defender su trabajo en directo solamente necesita su inconfundible voz y un público ansioso de verle disfrutar, y ambas cosas le acompañan. Sin duda es un disco imprescindible para todos los que añoran los ochenta, para todos los que viven recordando aquella que época en la que música y cultura eran una. Una forma de evasión y unión que marcaba tendencias y arropaba a la gente. Si no fuera por discos como estos, la cultura musical actual de nuestro país estaría más que vacía, no tendría apenas sentido.

sábado, 23 de febrero de 2008

Resucitando el pop.


Shuarma
1º disco: Universo
Colaboraciones: Yeelen, Juan Aguirre, Susú (La media luna), Damián Martínez
Azar Record, 2007

El primer disco del componente de un grupo separado es siempre un regreso esperado con ansia sobre todo por los seguidores del grupo. Las primeras reacciones suelen ser siempre las de aquellos que no han quedado satisfechos, porque alguien que se detiene a dar una segunda oportunidad tarda más en dirimir. Pertenezco al segundo grupo y no me importa en absoluto decir que a veces cuando camino por la calle se me escapa el tarareo de alguna canción del primer disco en solitario de Shuarma, "Universo". Y es que esta nueva faceta renovada del vocalista y alma del grupo Elefantes colma las expectativas de los viejos seguidores fanáticos, entre los que me incluyo, de su antigua banda. El nuevo sonido de Shuarma revive la esencia más profunda del pop español más puro hecho desde el corazón, desde la reflexión llevada a cabo durante la parada profesional que supuso la ruptura del grupo. En este tiempo Shuarma ha sabido consagrar el estilo que hasta ahora solamente llevaba a cabo la banda catalana. Y lo ha hecho además desde el respeto y la fidelidad que le proporciona la mirada al pasado, porque sus raíces más profundas aparecen en cada una de las notas que se escuchan en este disco, si bien hay notables diferencias. "Universo" es un disco de estudio que parece grabado de una sola vez, como si de un directo se tratara, porque todas las canciones tienen un hilo argumental sonoro que las hace inseparables. No está de más comentar que esta es la propuesta más pop de toda la carrera de Shuarma y que si bien no abandona en ningún momento el intimismo de los otros discos, notamos una voz más apasionada y sincera que en anteriores trabajos. Y es que la música de "Universo" parece surgir de la voz de Shuarma con una naturalidad aplastante, porque como él mismo comenta, el disco "está hecho con mucho mimo". No hace falta que nos aclare este matiz porque la armonía de las melodías y el sonido de su voz acoplada a las guitarras solamente ha podido escucharse en sus anteriores conciertos.
La carrera de Shuarma no ha hecho más que empezar y él lo sabe bien, por eso ha querido ofrecer al gran público algo más que su primer disco. Este último trabajo ofrece una cuidada edición en la que cada canción va acompañada de un videoclip, además se incluye un documental y un libreto de 32 páginas. Con esto, consigue que sus seguidores se contenten mientras entienden su pequeño cambio de estilo. Y es que sus letras suenan ahora más que nunca positivas, alegres, vigorizantes, hasta incluso iluminadas por las buenas intenciones puestas en este disco. Pero no sólo la poesía de la composición resalta la activación de su aliento musical, sino que las melodías de cada una de las canciones tienen un sabor algo más elegante y optimista que en las anteriores. Parece que el cambio de aires le ha venido bien al cantante para encontrarse con sus verdaderos intereses y gustos, como proclama con certera pasión en la tercera pista del álbum, "Todo cambia": "cambia el rumbo el caminante/ aunque esto le cause daño/ y así como todo cambia/ que yo cambie no es extraño". La nueva etapa comenzada por el vocalista de Elefantes parece haberse tomado con mucha filosofía por parte del propio interesado, porque este disco deja traslucir que las prisas no han invadido al artista a la hora de desarrollarse en solitario y porque el resultado es un disco muy personal y constructivo.
Desde que le llegara el éxito rotundo con "Azul" y gracias a la producción de Bunbury en aquel álbum, la banda surcó los caminos del pop más equilibrado y dejó de dar tumbos por las discográficas españolas. Ahora, tras la separación del grupo, el alma mater de la misma compone lo que desea y arregla lo que le conviene en sus canciones, porque él es su propio jefe, no hay nadie más. Quizá por ello precisamente Shuarma se ha permitido la libertad de ceder los derechos de autor de "J'habite a l'Eden" a Intermon Oxfam. En esta canción está además acompañado de un grupo de Burkina Faso, Yeleen, y la fusión de ambas culturas musicales resulta bastante gratificante. El uso de la instrumentación típica africana, además de la ya habitual en sus trabajos hace de esta pista una parte muy importante del disco, que define el alma de este disco. Por eso tampoco nos sorprende ya el magistral uso del violín que hace el compositor en "El tiempo puede esperar", tema en el que también participa Juan Aguirre (Amaral). Un disco en definitiva básico en la comprensión del interior de Shuarma, que se define claramente con cada acorde escuchado. El universo de Shuarma más al desnudo que nunca, en la más pura de sus expresiones. Apto para descubrir nuevas sensaciones.

Un buen maestro para un excelente alumno.



Amaro Ferreiro
LaCiudadDeLasAgujas

1º disco: 2006
Colaboraciones: Iván Ferreiro, Xoel López (Deluxe), Leiva (Pereza) y Eva Amaral (Amaral)


Para un artista que empieza en la jungla musical de nuestro país, ser hermano de Iván Ferreiro puede resultar un estigma, por eso de las comparaciones, pero seguro que ese apellido consigue que muchas puertas se abran de golpe, algo que le guste o no, tiene que soportar. Además, Amaro puede sentirse orgulloso de su hermano y no le vendría mal pensar que si algunos artistas españoles tuvieran como maestro personal a uno de los personajes más carismáticos del panorama musical español, la situación sería otra bien distinta, la música en directo sería un bien protegido por el Estado. Pero hasta que eso ocurra tendremos que conformarnos con escuchar discos como el que Amaro Ferreiro ha consumado. El hermano del cabecilla de Los Piratas se presenta en solitario en un disco intimista y personal, que aunque se puede considerar heredero de la música de Iván, se separa de su influjo en la mayoría de los cortes. Hay algo característico de Los Piratas nada más observar el disco, el título, que resulta a simple vista bastante atractivo y sugerente, ("LaCiudadDeLasAgujas") y recuerda a las provocaciones de la banda nacida en los 90. Cualquier persona con cultura musical suficiente y con cierta memoria puede con estos datos proporcionados, hacerse una idea del estilo del artista, ya que la excitación de la imaginación del público, que era una parte importantísima del trabajo de Iván, se repite con su hermano. Durante 30 minutos el disco es capaz de transportar al que lo escucha a un lugar en el que los relojes no tienen manecillas y la voz pausada y suave de Amaro sirve como hilo conductor por este "viaje sideral" alrededor de las melodías frenéticas, donde las letras son lo más importante. En este sentido Amaro imita a su ídolo, su hermano Iván, aunque se separa de él en el uso de los efectos de sonido tan característicos del trabajo de la legendaria banda, parece que este tipo de filtros no calan entre el 'hermanísimo'. Por otro lado para considerar este disco una buena obra no hace falta la comparación con su hermano, porque Amaro se vale por sí mismo para crear un estilo, para crear un disco independiente y novedoso que se aleja de las melodías sin sustancia a las que nos tienen acostumbradas las multinacionales. El disco contiene 10 canciones en las que Amaro se deja la piel y la voz para mostrarnos su lado más íntimo, sus pensamientos y pasiones. Una buena forma de reflejarlo es la primera pista de este trabajo en solitario, "Bordadita", una canción que como él mismo asegura es "una verdadera canción de amor, en contraposición a las últimas canciones que llevaba escritas", es algo más "luminoso": "hoy llegaremos a las manos/ lanzarte hacia el espacio interior/ enamorarte contra mi colchón/ quiero coserme para siempre al bolsillo de tu pantalón". Realmente son versos originales que aunque ahondan en un tema muy usado se desvían del tratamiento habitual. Además el ritmo de cada una de las canciones es diferente y las melodías son todas curiosas e irrepetibles, que en otro contexto, con otras palabras y otra voz quizá no resultaría tan acertado.
Amaro Ferreiro ha contado en su primer disco con colaboraciones de lujo como las proporcionadas por su hermano en dos canciones, pero no interpretando, sino en la elaboración de los filtros, son "Ninguna parte" y "La gran pantalla". Iván no ha participado como cantante en el disco, quizá para alejar las comparaciones y dejar que sea su hermano el que se construya su propio futuro en el mundo de la música. Por otro lado, sus amigos Xoel López, responsable de Deluxe, y Leiva, componente de Pereza, le brindan sus voces para los coros en "Sentimentiras", la canción con la melodía más popera y las guitarras acústicas más rítmicas de todo el disco. Además Amaro se permite el lujo de contar para la última canción, "Algunas veces", con una voz femenina bastante conocida, la de Eva Amaral, que resultaba necesaria en este corte. Con esta recopilación de grandes talentos nos encontramos con un disco novedoso con una base rítmica cambiante, una tonalidad de voz diferente, melancólica aunque a ratos vivaz. Además hay algo muy curioso en la forma de componer las letras de este disco. Y es que parece que Amaro escoge un vocabulario específico para cada pista, dependiendo precisamente del tema del que se trate, y lo desarrolla durante toda la canción magistralmente (no lo intenten en casa, puede ser peligroso). Sin duda un disco para escuchar una y otra vez, que no defrauda y que deja el listón de la música popera bastante alto. Que vengan y se atrevan a bajarle de ahí.